Santiago Jamiltepec, Oax. A escasos treintaicinco días de haber escapado de la muerte luego de haber sido víctima de un atentado en su contra, José López Merino, presidente de la Comisaría Ejidal de este municipio, nuevamente fue atacado a balazos cuando viajaba en compañía de su hijo a bordo de un automóvil Volkswagen Bora blanco sobre la Carretera Federal 200 en el kilómetro 25+100, cerca del paraje la Curva del Pastel.
Estos hechos se registraron el martes veinte de septiembre por la tarde; tras el atentado, el paradero del funcionario se desconocía, llegando a correr rumores de su posible deceso, sin embargo, estas versiones resultaron falsas pues el Comisariado Ejidal logró salvar una vez más la vida.
Pese al hermetismo que guardaban las corporaciones policiacas sobre el caso, se cree que el ataque se registró alrededor de las tres de la tarde de ese día, cuando López Merino regresaba a Jamiltepec a bordo de un automóvil Bora, conducido por su hijo Omar López Hernández de veintidós años de edad.
Fue cuando circulaban sobre la Carretera Costera, en el kilómetro 25+100 cuando los tripulantes de este vehículo fueron atacados a balazos con rifles de alto poder por hombres armados quienes se encontraban apostados a orillas de la carreta, en el incidente el conductor aumentó la velocidad de su vehículo, y luego ambos tripulantes descendieron y abandonaron la unidad de motor unos cuatrocientos metros adelante del lugar del ataque, debido a que el vehículo perdió fuerza luego que las balas hicieron blanco en partes del motor.
En tanto, un automovilista que pasaba por el lugar fue despojado de su unidad de motor y a bordo de ésta los agresores siguieron al auto en que viajaba José López, al localizar el auto metros adelante los agresores nuevamente abrieron fuego contra la unidad, para luego dar media vuelta y escapar con dirección a Huaxpaltepec.
Minutos después al lugar arribaron elementos del Ejército Mexicano, Policía Estatal Preventiva, Policía Municipal y elementos de la Agencia Estatal de Investigaciones.
Omar López Hernández, quien presuntamente manejaba el auto Bora, resultó ileso en el ataque, pese a que el auto presenta alrededor de quince impactos de bala, cabe recordar que otros dos hijos del comisariado fueron ejecutados el año pasado, el veintisiete de septiembre su hija y el quince de diciembre su hijo.
Finalmente trascendió que en el lugar de ataque fueron levantados más de quince casquillos percutidos calibre .223 de rifles R-15 en tanto la unidad Nissan doble cabina blanca con placas de circulación AC-69-462 de Aguascalientes, vehículo en el cual los sicarios huyeron, fue localizada al día siguiente en el Paraje El Llano, entre los límites de Santa María Huazolotitlán y San Andrés Huaxpaltepec, en un brecha ubicada del lado izquierdo de la Carretera Federal y cuyo camino inicia metros adelante de un restaurante ubicado en el paraje conocido como La Recta de Huaxpaltepec.